Noveno año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 5.000 escritores, respetando el derecho de autor.
Publicación Nª 2.492-
Alicia Martínez Juan
Poetisa y gestora cultural de España. Es Licenciada en Ciencias de la Información, ha trabajado 20 años en distintos medios de comunicación. Gestiona el Bar El Dorado, ahora Asociación Literaria, que se ha convertido en referencia poética en toda España. "Corazón de manzana" editado por el sello valenciano Cocó, es su primer poemario. El último proyecto en el que se ha embarcado, siempre buscando la reconexión poesía-pueblo, ha sido la organización del Festival de Poesía de Valencia "Vociferio", del que está preparando su tercera edición. Su naturaleza poética la empuja hacia la oralidad y la dramatización lírica.
"Siete soles, desde entonces
te han alumbrado. Siete lunas
han mecido tu sueño y compartido
siempre mis vigilias"
UNA MUJER
Canta un agua de su tierra
Los árboles atrapados en la acera
acarician su cabello
Lanza hojas al aire
Cartas de amor
que habrán de cruzar el mar
Sus ojos le están viendo. Él
sonríe.-
MUJER DOS
A falta de abrazos
se rodea el cuerpo con sueños
Fuerte
no vaya a salir volando
Escucha el canto africano
y lucha por cruzar la tierra
de costa a costa. Con él.
Sonríe.
Anochece en el polígono
ya no se oye a los pájaros
los obreros se van a casa.-
CLAVÓ
Clavó
y quebró la cal de los entierros
La roca devolvió la voz
a quienes la habían emitido
Los otros afinaron violines
en la espera
Afilaron uñas
desenterraron uno tras otro
huesos de herrumbre
El eco se convirtió en olivo.-
A ISAAC
Recupero los siglos perdidos por el hombre
con sólo un gesto de mi pecho cíclope
Miro tu perfil cincelado en carne nueva
tus ojos, verde selva, todavía extravían la mirada
El mismo bosque perdido con el que tu padre
sembró de amor las sangres de las que naciste
he descubierto mi pecho para ofrecértelo,
ahíto de savia.
Me he desvestido de siglos
para darte a la mujer que me habita.
Tú, rosa fruncida,
a la espera de rocío
manos vagabundas de caricias
Llanto seco
Cierro los ojos
escucho el rumor de tambores viejos
el aullido de las lobas
el latido de las mujeres muertas
la llamada de las madres -La Madre-
Hundo mis pies en tierra húmeda
tierra de conchas rotas
Y avanzo
Te rodeo de abrazos
mi carne cae sobre la tuya
Te envuelvo
Madre e hijo son, otra vez, uno
Simiente y tierra
Sol y agua
Luna y sueños
Cubrid mis senos henchidos de vida
Sólo ahora se mostrarán de uno en uno.-
Alicia Martínez Juan
Imágenes: Pinturas de Vladimir Volegov (Rusia, contemporáneo)
quiquedelucio@gmail.com
Blog auspiciado por Canadian Cultural Center of Montreal.
Publicación Nª 2.492-
Alicia Martínez Juan
Poetisa y gestora cultural de España. Es Licenciada en Ciencias de la Información, ha trabajado 20 años en distintos medios de comunicación. Gestiona el Bar El Dorado, ahora Asociación Literaria, que se ha convertido en referencia poética en toda España. "Corazón de manzana" editado por el sello valenciano Cocó, es su primer poemario. El último proyecto en el que se ha embarcado, siempre buscando la reconexión poesía-pueblo, ha sido la organización del Festival de Poesía de Valencia "Vociferio", del que está preparando su tercera edición. Su naturaleza poética la empuja hacia la oralidad y la dramatización lírica.
"Siete soles, desde entonces
te han alumbrado. Siete lunas
han mecido tu sueño y compartido
siempre mis vigilias"
UNA MUJER
Canta un agua de su tierra
Los árboles atrapados en la acera
acarician su cabello
Lanza hojas al aire
Cartas de amor
que habrán de cruzar el mar
Sus ojos le están viendo. Él
sonríe.-
MUJER DOS
A falta de abrazos
se rodea el cuerpo con sueños
Fuerte
no vaya a salir volando
Escucha el canto africano
y lucha por cruzar la tierra
de costa a costa. Con él.
Sonríe.
Anochece en el polígono
ya no se oye a los pájaros
los obreros se van a casa.-
CLAVÓ
Clavó
y quebró la cal de los entierros
La roca devolvió la voz
a quienes la habían emitido
Los otros afinaron violines
en la espera
Afilaron uñas
desenterraron uno tras otro
huesos de herrumbre
El eco se convirtió en olivo.-
A ISAAC
Recupero los siglos perdidos por el hombre
con sólo un gesto de mi pecho cíclope
Miro tu perfil cincelado en carne nueva
tus ojos, verde selva, todavía extravían la mirada
El mismo bosque perdido con el que tu padre
sembró de amor las sangres de las que naciste
he descubierto mi pecho para ofrecértelo,
ahíto de savia.
Me he desvestido de siglos
para darte a la mujer que me habita.
Tú, rosa fruncida,
a la espera de rocío
manos vagabundas de caricias
Llanto seco
Cierro los ojos
escucho el rumor de tambores viejos
el aullido de las lobas
el latido de las mujeres muertas
la llamada de las madres -La Madre-
Hundo mis pies en tierra húmeda
tierra de conchas rotas
Y avanzo
Te rodeo de abrazos
mi carne cae sobre la tuya
Te envuelvo
Madre e hijo son, otra vez, uno
Simiente y tierra
Sol y agua
Luna y sueños
Cubrid mis senos henchidos de vida
Sólo ahora se mostrarán de uno en uno.-
Alicia Martínez Juan
Imágenes: Pinturas de Vladimir Volegov (Rusia, contemporáneo)
quiquedelucio@gmail.com
Blog auspiciado por Canadian Cultural Center of Montreal.