Duodécimo año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector,en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 10.000 escritores, respetando el derecho de autor.
Publicación N° 3.033-
Gerardo Diego
Poeta y narrador español, nacido en Santander, Cantabria, el 3 de octubre de 1896 y fallecido en Madrid, el 8 de julio de 1987. Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Deusto y luego se doctoró en Madrid. Desde 1920 fue catedrático de Lengua y Literatura en institutos de Soria, Gijón, Santander y Madrid. Desde 1947 fue miembro de la Real Academia Española, en 1997 se le concedió el Premio Cervantes. Parte de su extensa obra: "El romancero de la novia" (1920), "Imagen-Poemas" (1922), "Manual de espumas" (1924), "Versos humanos" (1925), "Fábula de Equis y Zeta" (México, 1932), "Poemas adrede" (1932), "Alondra de verdad" (1941), "La sorpresa" (1944), etc.
"Y resumiendo el amador su dicho
recogió los suspiros redondeles
y abandonando al humo del capricho
se dejó resbalar por dos rieles"
AYER SOÑABA
Ayer soñaba.
Tú eras un árbol manso
-isla morada, abanico de brisa-
entre la siesta densa.
Y yo me adormecía.
Después yo era un arroyo
y arqueaba mi lmo de agua limpia,
como un gato mimado,
para rozarte al paso.-
GESTO
A la brisa, a la abeja, a la hermosa
el rosal puede dedicar la rosa.
Al poeta, al grumete, a la doncella
la noche puede dedicar la estrella.
Si eres tú misma el rosal y las rosas,
la noche de mi verso y sus estrellas,
¿a quién dedicaré este breve cielo,
este arbusto, esta fuente, este desvelo?.-
GLOSA
la de tus apasionadas
promesas de eternidades,
y entre tus sinceridades,
la doble verdad querida
con que llaman a la vida
tus dos palmas amorosas
cuando estrechan, perezosas,
mi mano desfallecida.-
ME ESTÁS ENSEÑANDO
Me estás enseñando a amar.
Yo no sabía.
Amar es no pedir, es dar,
noche tras día.
La Noche ama al Día, el claro
ama ala Oscura.
Qué amor tan perfecto y tan raro.
Tú mi ventura.
El Día a la Noche alza, besa
sólo un instante.
La Noche al Día -alba, promesa-
beso de amante.
Me estás enseñando a amar.
Yo no sabía.
Amar es no pedir, es dar.
Mi alma, vacía.-
POR QUÉ CUANDO TE HABLO...
¿Por qué cuando te hablo
cierro los ojos?
Yo pienso en aquel día
y en qué tú me los cierres
-esperanza infinita-,
a ver si mis palabras
-costumbre larga mía-
pueden más que la muerte.-
Gerardo Diego
Imágenes:¨Pinturas de Vladimir Volegov (Rusia)
Blog auspiciado por Canadá Cultural Center of Montreal