Duodécimo año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividd del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 10.000 escritores, respetando el derecho de autor.
Publicación N° 3.137-
Aleyda Quevedo
Poetisa y narradora de Ecuador, nacida en Quito, en 1972. Ejerce el periodismo para revistas de su país. como Cosa, Panorama y Kipus y para medios de México y Brasil. Ha publicado los libros de poesía: "Cambio en los climas del corazón" (1989), "Algunas rosas verdes" (1996), "Espacio vacío" (2001 y reeditado en 2007), "Música oscura", "Soy mi cuerpo" (2006), "Dos encendidos" (2008), etc. En 1996 recibió el Premio Nacional de Poesía "Jorge Carrera Andrade". Sus poemas han sido traducidos al inglés, portugués, hebreo y alemán. Ha particiado en los más importantes encuentros literarios y festivales de poesía de Latinoamérica y el Caribe.
"Despacio sueltas tu calor
Tu lengua ejerce la función
para la que fue creada y cumples
con el acto de volverme sensible"
NOCHE BLANCA
En un inmenso hospital
un cuerpo vestido de espinas
Soy virtualmente la virgen del desierto
estampa desmayada sobre el miedo
Nada más, yo
con las manos llenas de clavos calientes
caminando descalza entre las dunas
Un inmenso hospital en un desierto blanco
De mi boca sale el mensaje divino
pero aquí nadie me oye.-
MÚSICA JAPONESA
¡Ah! de las horribles pasiones que recorren mi
cuerpo
insoportables cuando ls ojos de otros miran
Sé que voy
hacia el despeñadero de cuerpos desconocidos
que aman y emocionan
Señor, no me abandones en arenas
de almas en movimiento
soy tuya
camino escalza y pulcra en mitad del desierto
preparada para el goce o la muerte
Más allá de esta seducción
guía mis pasos en el amor.-
ALGUNAS ROSAS VERDES
Esta mujer de hechizos
de mentiras y
yeso
para el día
de su muerte
Una cruz
una caja de madera
algunas rosas verdes
esperan por ella
No hay temor
a la muerte
Sólo pido
sea justa.-
LIMÓN PERFUMADO
Soy mi cuerpo
atrapado por partículas
de otros cuerpos
Cuerpo mío
que enjabono en el mar
reconociendo suciedades
y miedos
Miedos míos
enjuagados con
el agua que todo lo cura
la sal de mi sudor
los celos bien guardados
los dulces jugos
y de nuevo el agua
que me concede
un cuerpo nuevo cada día
Cuerpo fresco
tendido en a cama
como limón al filo
de la ventana
Lloro y mis piernas blancas
se vuelven negrura profunda
que bloquea los sentidos
Cuerpo mío
pólvora cielo
intenso estallido
de lámpars que filtran tu claridad
sobre mi pecho
Soy este cuerpo mío.-
Aleyda Quevedo
Imágenes: Pinturas del modernismo.
Quiquedelucio@gmail.com
Blog auspiciado por Canadá Cultural Center of Montreal.